Nadie sabe quién es Dama, solo que pinta. Se desconoce si es joven, viejo, si es hombre o una mujer. De Dama solo se ha oído que emplea su mano izquierda, que ejecuta sus trabajos como acuchillando el lienzo. Salvo aquellos que las compran, nadie ha visto lo que oculta bajo el papel de estraza con el que envuelve sus pinturas.
Con cada subasta, su obra se revaloriza y la incógnita sobre su identidad aumenta; pero cuando Lucas Cúe, el popular deportista, aparece brutalmente asesinado, el inspector Valtierra debe encontrar un nexo entre el crimen y el cuadro más reciente del misterioso pintor; descubrir quién acecha tras el seudónimo.
Santander, Madrid, Londres, París. Una amalgama de horror y belleza, una trama vertiginosa y oscura que nos sumerge en el mundo del arte y la muerte, en las sombras ocultas que manejan nuestras vidas.
Ésta es la segunda novela de Greta Alonso tras “El cielo de tus días”, una autora que escribe bajo seudónimo y que utiliza como escenarios su entorno más cercano, Cantabria. Debo decir que no solo ha cumplido con mis expectativas tras su anterior libro, algo que no siempre sucede, sino que las ha superado con creces. Estamos ante un adictivo thriller que ya engancha en las primeras páginas y que va en crescendo en todo momento. La trama, perfectamente hilada conduce a un desenlace insospechado pero no por ello carente de lógica. Los personajes dotados de confusas relaciones entre sí que se van destapando a lo largo de la obra, van creciendo a la par hasta llegar a un desarrollo pleno tanto en su complejidad como en su evolución emocional, revelando capas ocultas de sus personalidades. En resumen, una novela altamente recomendable.
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